Motivación Positiva Vs. Motivación Negativa
Motivación Positiva Vs. Motivación Negativa
Hagamos referencia ahora a las diferencias entre la motivación laboral positiva y la motivación laboral negativa. Por una parte, estar motivado de forma positiva te permite, sin duda, enfocarte en los aspectos positivos que se derivan de completar una asignación o alcanzar con éxito un objetivo planificado. Aquí hay algunos ejemplos de ideas o pensamientos que te vienen a la mente cuando tienes una motivación positiva:
- Terminar este proyecto en el trabajo me ayudará a ganar un ascenso.
- Incorporarme a este curso me permitirá desarrollar otras habilidades informáticas en mi empresa.
- Aplicar para este empleo podría abrirme una oportunidad para cambiar de carrera.
Por otra parte, la motivación negativa desenfoca los pensamientos y acciones positivas, y puede que cometas un error o no completes una tarea planificada por culpa de esto. Observa estos ejemplos de predisposición que impiden que actúes de manera correcta bajo una motivación laboral negativa:
- Si mi presentación no es bienvenida, esto afectará mis posibilidades de ascenso.
- Si no termino esta tarea, mis compañeros se sentirán decepcionados conmigo.
- Si no recibo esta oferta de trabajo, perderé una gran oportunidad de obtener una carrera que me gusta.
Es un hecho que eres capaz, que lo creas es tu elección.
Anibal Pérez
El Tipo De Motivación Depende De Cada Persona
No todo el mundo reacciona igual respecto a la motivación. Hay personas que son positivas por naturaleza y que todo es maravilloso.
Por el contrario, hay personas que han crecido en un mundo o ambiente negativo, y es lo que les hace funcionar. Por norma general, suelen ser personas que trabajan en ambientes tóxicos o de una fuerte jerarquía (como puede ser el ejército).
También es importante tener en cuenta que el tipo de motivación puede variar dependiendo el tipo de tarea que tenemos que hacer.
¿Cómo Puedes Utilizar La Motivación Para Mejorar Tu Productividad?
Aquí está la clave para tu futuro. Piensa el tipo de motivación que puede ayudarte a mejorar. Revisa las tareas que tienes que hacer y añádeles lo siguiente:
Recompensa por hacer las tareas (Positivo): dependerá del tamaño de las tareas, pero pueden ser cosas tipo: darte una recompensa, salir antes de trabajar, comer fuera el fin de semana, ver una película que tenías anotada, etc.
Castigo por no hacer las tareas (Negativo): al no haber hecho tus tareas, entonces no podrás ver esa película esa semana, tendrás que comer verduras, nada de jugar, hacer 20 sentadillas (esta la utilizo con mis clientes), hacer algo para un tercero (compañero/a, amistad, familiar, etc.)
No todo tiene que estar asociado a recompensa o castigo, pero puede ser una herramienta muy útil en casos muy concretos en los que necesites una motivación extra para sacar algo adelante.
Es Importante Establecer Metas
Para tener una motivación laboral positiva y sostenible, es importante que comprendas tus objetivos finales. La motivación puede ser útil para muchas situaciones de la vida, por ejemplo, al tratar de completar tu educación, buscar cambiar de carrera o trabajar para desarrollar ciertas habilidades. Los objetivos te dan dirección y te permiten concentrarte en los pasos que debes seguir para alcanzarlos.
Si no estás seguro de los pasos que debes seguir para lograr tu objetivo, busca recursos que expliquen la experiencia, credenciales, habilidades u otros atributos que pueden ayudarte a alcanzar ese hito. Por ejemplo, si trabajas para completar tu educación, reúnete con un consejero para delinear los cursos que necesitarás para obtener tu título.
Si buscas una nueva carrera, realiza entrevistas informativas con personas que trabajan en ese campo para averiguar cómo llegaron a donde están ahora. No importa cuál sea tu objetivo final, establecer hitos más pequeños y alcanzables durante el proceso te ayudará a mantenerte motivado y positivo en relación con tu progreso.
Al establecer metas, puede ser útil compartirlas con mentores, amigos o colegas de confianza para ayudarte a mantenerte enfocado y ser responsable contigo mismo. También puedes considerar escribir tus objetivos y publicarlos en un lugar muy visible como un recordatorio constante. El seguimiento de tu progreso puede ayudarte a mantener la motivación que te inspiró a lograr esos objetivos en primer lugar. (SG)



