Cómo Detectar Los Clientes Tóxicos De Mi Emprendimiento
Cómo Detectar Los Clientes Tóxicos De Mi Emprendimiento
Los consumidores tienen la capacidad de hacer que nuestro trabajo sea una caminata en el parque, o un maratón sin fin: especialmente los clientes tóxicos. Todos los emprendedores que han trabajado con los diferentes tipos de clientela saben cuán increíblemente difíciles puede ser tratar con ciertas personas. No importa si eres el ser más amigable del mundo, te puede tocar ese mal día en el que el próximo cliente que atenderás sea una verdadera molestia.
En el mundo de los negocios se utiliza muy a menudo la falacia de “el cliente siempre tiene la razón”, y hoy queremos tratar de insertar la idea en tu proyecto de que eso no es así, bajo ningún concepto, pues simplemente no siempre la tiene, especialmente cuando su actitud o intenciones con tu producto o servicio no son los planteados en tus lineamientos del éxitos que te has trazado y llevarle la contraria puede representar, desde una mala y negativa critica, hasta una pérdida de tiempo y recursos de tu organización.
Es un hecho que eres capaz, que lo creas es tu elección.
Anibal Pérez
Problemas Con La Propuesta Inicial Y La Forma De Pago
Cuando el cliente ya empieza con mal pie, ponte alerta. El principal error que solemos cometer en las primeras negociaciones es ser demasiado condescendientes en los precios o las condiciones de pago, con lo que podemos acabar perdiendo dinero. Si crees que tu presupuesto es justo, mantente firme o rechaza la oferta de trabajo.
Actitud “Fantasma”
Llamo así a ese tipo de cliente que llega por la puerta grande, prometiéndote el cielo y presumiendo de su capacidad económica, pero que a la hora de la verdad echa marcha atrás con alguna excusa. El trabajo que encarga finalmente es mucho menor que el que se planteaba en un principio y regatea cada céntimo.
No Acepta Los Consejos Dados
Muchas veces puede ocurrir que un cliente desoye nuestros consejos o no está de acuerdo con nuestra opinión. En principio podría ser normal tener una diferencia de opiniones, lo que ya no se puede permitir es que sea algo constate en el tiempo. Este tipo de clientes puede terminar dañando la reputación de la empresa si decide culparla por su falta de éxito. Son clientes que, en un momento dado, pueden llegar a acusarnos de falta de profesionalidad, mejor alejarse de ellos.
Se Comporta De Manera Agresiva
Este es otro caso en el que se pueden advertir señales de problemas, presentes y futuros. Dichos clientes no buscan un producto o servicio, sino una razón para pelear, quedar por encima o, incluso, vejar a la persona que tienen enfrente. Incluso si eres buen profesional, el alborotador encontrará algo de qué quejarse y mostrará agresividad al expresarlo. Aceptar este tipo de comportamiento no es beneficioso para ninguna empresa y puede acabar por pasarle factura como propietario de un negocio.
Exige, Se Cree Que Lo Sabe Todo
Este cliente está seguro de que sabe todo sobre usted y su negocio y, por lo tanto, es escéptico y arrogante en la conversación. Es casi imposible sorprender, convencer o influir emocionalmente de alguna manera en este usuario: es el sabelotodo. Cuesta hacerle entrar en razón. Además, suele ser exigente, con encargos urgentes, de última hora o excesivos. No valora el tiempo y el esfuerzo que requieren las cosas.
Recuerda que no se trata de tener clientes y ya. O de hacer una traducción de calidad, entregarla a tiempo y ya. Cuando tienes tu propio emprendimiento, tú eres tú negocio, tu marca personal, y es tu responsabilidad llevarla adelante y hacerla crecer.