Como Gestionar Los Objetivos Incumplidos
Como Gestionar Los Objetivos Incumplidos
Una de las herramientas en la que más énfasis hacemos en Super hábitos es en el hábito de proponerse objetivos semanales (y, por supuesto, hacer una revisión para ver si se cumplieron o no).
Cientos de emprendedores ya han incorporado los objetivos semanales a su rutina, pero muchos se enfrentan a un problema recurrente: la frustración que surge cuando no han podido cumplir.
Es un hecho que eres capaz, que lo creas es tu elección.
Anibal Pérez
El Motivo De Los Objetivos Incumplidos
Para gestionar correctamente los objetivos incumplidos primero hay que conocer su origen. Hay muchísimas razones por las que no se cumplen objetivos, pero casi todas responden a una de estas categorías:
Falta de planificación. Plantear el objetivo es sólo el primer paso, una vez que lo tienes debes planear las acciones que te ayudarán a conseguirlo. Poner el objetivo por escrito, incluso colocarlo en un lugar visible, no es garantía de que vayas a conseguirlo. Debes trazar un plan, establecer tareas concretas e incluirlas en tu planificación.
Definición incorrecta. Hay cierta confusión entre lo que es un deseo y lo que es un objetivo. Los deseos son expresiones vagas de algo que te gustaría alcanzar, pero los objetivos deben cumplir algunas normas. Para una buena formulación, debe ser específico, medible, alcanzable, relevante y con un tiempo definido. Si un objetivo no cumple estas condiciones, es posible que estemos hablando de un deseo, algo demasiado impreciso y poco accionable.
Objetivo equivocado. ¿Te has preguntado por qué planteaste ese objetivo? Las razones detrás de cada objetivo son muy importantes, por eso es muy útil definirlos partiendo de una misión personal. Pero, aunque no tengas tu misión definida, sí puedes buscar los motivos que hay detrás de los objetivos incumplidos, para ver si son correctos o no. Es muy frecuente fracasar en la consecución de tus objetivos cuando las razones no son las adecuadas. Puede que un objetivo no sea en realidad importante para ti, que sea algo que querías en el pasado, algo que tu entorno espera de ti o incluso una cuestión de apariencias.
¿Qué Hacer Con Los Objetivos Incumplidos?
El primer paso es la reflexión: piensa e identifica honestamente la razón por la que no has cumplido tu objetivo y comprueba a qué categoría pertenece. Según la explicación que des a cada objetivo incumplido, podrás tomar diferentes medidas.
Si era un objetivo equivocado la solución más sencilla es descartarlo. Si ya no te interesa, no te identificas con él o no crees que te ayude a lograr la vida que deseas, táchalo de tu lista sin piedad. Puede que necesites dar alguna explicación (a ti o a tu entorno) para justificar el abandono del objetivo. Pero no pierdas demasiado tiempo con esto; si el objetivo no es para ti, busca otro que sea más significativo.